Premio CIUDAD DE HUESCA
42ª Edición
2014
Adriana debutó con 16 años en Mala espina, un corto de Belén Macías. Su gusto por la formación y el estudio se mantenían intactos: aprendió danza, flamenco, inglés, piano, canto e interpretación y se matriculó en Filosofía y Letras. Su primer largometraje, Cabeza de perro, lo rodó con 20 años y ya llamó la atención: fue nominada en los Goya como actriz revelación Desde entonces Adriana ha vivido dos carreras paralelas, como si hubiera dos Adrianas. Una es la actriz de culto de películas como Castillos de cartón, Lo contrario al amor o Combustión, o funciones como El gran teatro del mundo, donde, por cierto, fue dirigida por Carlos Saura. La otra es la intérprete que ha cautivado a millones de españoles en las series como La señora y este mismo año, El tiempo entre costuras. Adriana, en cualquiera de las dos versiones, es una actriz superlativa e hipnótica, de la estirpe de las más grandes.
Luis Alegre